Y el tema del momento es la excarcelación casi gratuita de los cinco miembros de la piara de cerdos, más que manada. Dos de los tres jueces, el que pedía la absolución porque, según él, ella tan mal no lo pasó porque no dijo nada y la única juez mujer, que ha cambiado de parecer desde que se dio la sentencia hasta ahora, han decidido por mayoría simple, en contra de la opinión del tercer magistrado, que pueden salir del talego si pagan 6.000 € porque no hay riesgos, aunque cuatro de los cinco animales tengan un juicio pendiente por un caso similar en Pozoblanco, Córdoba. ¿Estamos leyéndolo? ¿No hay riesgo de reiteración, aunque tienen otro juicio pendiente y no dan muestras de arrepentimiento?
Y así es nuestro poder judicial retrógrado, paternalista y tremendamente misógino. Cuídate, mujer, de enfrentarte a un juez que va a medir el tamaño de tu falda o lo simpática y extrovertida que seas.
Indignación popular
Como dicen por ahí, después de ver cómo anda la justicia en este país, donde el cuñado del rey ingresa en una prisión de mujeres, los corruptos salen pronto y sin devolver nada, donde sí te encarcelan por cantar verdades, o te meten una pena desmesurada tras un juicio sin pruebas evidentes, el juez siempre sentenciará en favor del picoleto borracho.
¿Qué podemos esperar, mujeres, de un poder judicial que no nos protege y que nos infravalora por puta misoginia machirulista?
2 comentarios:
Si alguien aún tenía dudas sobre la ceguera de la justicia, ahí va una prueba más sobre ella y sobre la ineptitud de quienes la administran.
Y lo que es peor, uno de los jueces que admiten la libertad provisional es mujer, lo que he dicho cientos de veces, la mujer tiene, también, a algunos enemigos en casa.
Publicar un comentario