El reino del terror

Hace ya un largo tiempo que los blogs están de capa caída. Todo el mundo prefiere otro tipo de modos de expresión instantáneas y rápidas, como facebook, con poco que leer, porque leer también está en desuso, con twitter, un medio que lo único de demuestra es lo cretino, desletrado o inculto  que puede ser alguien en tan sólo 140 letritas, o instagram, para escribir menos, aún. ¡Viva la imagen, aunque nos engañe!

Y así, poquito a poco, haciéndonos cómodos y escribiendo lo justito también nos acomodamos a leer lo menos posible y a dejar de encontrar las trolas que nos cuelan los medios de desinformación y manipulación.

A ver qué dices, que te comes la porra

Pero no es sólo esto. Resulta que para lo poco que escribimos, hay que andar con pies de plomo, porque por dar una opinión pueden buscarte un disgusto. Ayer dos indivíduos aceptaron penas de año y medio de prisión, para librar la cárcel por no tener antecedentes....hasta ayer y cinco años de inhabilitación sólo por poner una opinión, lo del buen o mal gusto va por barrios. Y es que es delito, concretamente "enaltecimiento del terrorismo" sólo en el supuesto de que se sea de una ideología determinada. Las hay de derechas que se ríen de amenazas de muerte a izquierdistas, los vocingleros radiofónico con pasado chaquetero que desean disparar sobre miembros de un partido y exaltaciones varias de los nostálgicos del régimen nacionalcatólico, pero en estos casos no hay sentencias ejemplarizantes con la ley mordaza en todo lo alto.

Esto no es delito y a callar o te detengo.

Espero que no sea demasiado tarde, quizá aún me vengan a detener por haber dado mi opinión en algún foro, el facebook, el twitter o este modesto blog, porque mi opinión puede molestar y hay que callarme (Menos mal que no me lee más que una reducida muestra de la población).

Si nuestros derechos laborales y sociales van a la merma, si el Estado sanciona más que ampara, si hasta la educación y la sanidad son carne de privatización y nosotros vamos a ser los desechos pobres de esa Europa vendida a los EEUU por el TTIP que ni vamos a tener la suerte de trabajar de esclavos sino de pedir en la puerta de los hoteles de las costas de Levante y Andalucía, cuando no, hacer de jineteras, encima habremos de callarnos porque si no vendrá un juez y te sentenciará por opinar y es que el Estado de derecho cambió la erre por una ese hace ya tanto que ni me acuerdo.