Tengo un bló

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Tmeo, la mejor revista de humor

jueves, 21 de mayo de 2020

Caceroladas subrepticias

No sé si es buena idea o, por el contrario, un error, dar publicidad a la gente que se manifiesta pidiendo la dimisión del gobierno. Y digo esto porque cuanto más publicidad se les hace, más adeptos mononeuronales pero con capacidad de voto los imitan en otras zonas pudientes del estado.  Zonas pudientes, claro. No me imagino a ningún pijo solapado de estos yendo a manifestarse a un barrio obrero, aunque en estos también haya débiles de conciencia a los que el carrasclás de los programas matinales de las pijas de las teles privadas estén lavando el cerebro con agua caliente, cosa que lo hace encoger.


Lo disfrazan de hartazgo y difunden indignación por la mala gestión de la crisis sanitaria haciendo responsable al Sánchez de todas y cada una de las muertes de los infectados. La gente cuando ruge desaforada no atiende a razones. Por mucho que lo disfracen de esto y por mucho que la gestión no guste a todo el mundo, ya sabemos lo que hay detrás de esta llamada "revuelta de los borjamaris". Proclaman que el gobierno es socialcomunista (sic), bolivariano, etarra y rojo y lo que lanzan es una bilis de malos perdedores en las urnas que no soportan la democracia, miran con nostalgia al franquismo y algunos se atreven hasta de mencionar cunetas, con lo cual demuestran de qué palo van.

Importante llevar la bandera, eso sí, la constitucional, no la del pollo. ¿Tanto símbolo es porque el enemigo a confrontar tiene otra bandera, quizá?. De la mascarilla en la barbilla no digo nada.


Esto no es más que el siguiente paso de la oca del plan fascista para minar al gobierno con claros fines electoralistas. La democracia, repito, les importa una mierda y desprecian lo que han votado la mayoría de españoles. Quizá hagan la salvedad entre españoles de bien (ellos) y españoles de mal (los que antes llamaban rojo-separatistas).  Como dice cierto pseudointelectual, paridor de ladrillos y confeso pederasta, "¿Duele que la derecha salga a la calle? Ya lo hizo en el 36". Tuitea esto porque hay quien  está montando un alzamiento nacional. Y lo están montando de la misma manera que hace 84 años. Desde el mismo momento que los poderosos perdieron las riendas del mando y la democracia vino a intentar, mientras se pudo, ser un poco más justo mediante la reforma agraria y educativa, la derecha más rancia no hizo otra cosa que preparar la zancadilla y planificar su venganza y lo que estamos viendo estos días, salvando mucho las distancias, se le asemeja bastante.

Cada vez disimulan menos.

No sé dónde acabará la "revuelta de los borjamaris" porque tiene elementos desconocidos como la ignorancia intencionada de las secuelas de la epidemia, pero creo que su fuerza sólo se sustenta en el caso que les hagamos.

Bonus track: El gobierno está pensando derogar la reforma laboral del PP con el apoyo de Bildu, cosa natural porque es un partido de izquierda. ¿Sabéis cómo se va a vocear esto en los medios? Pues con la ignorancia cegata  que dirá "ETA, ETA, ETA", sin que la mayoría de la gente sospeche cuánto beneficio supone este apoyo para la derogación de una reforma laboral tan nociva para la clase trabajadora. Menos Anarrosas y Grisos y más periodismo (Porque lo otro no lo es) que informe de verdad.

2 comentarios:

Txomin Goitibera dijo...

En 1973 el pijerío chileno también se puso a hacer sonar las cacerolas. Pablo neruda dejó constancia de ello:

Doña Cacerolina Lagañín,
encumbrada en el trono de su plata,
estuvo a punto de llorar por fin...
https://percy-francisco.blogspot.com/2013/04/neruda-y-las-cacerolinas.html

Emilio Manuel dijo...

Esta no es la revolución de los claves, es la de los pijos, o la de los Cayetanos, que es como la llaman en los medios. Me considero persona mucho más a la izquierda que la de esta socialdemocracia que nos gobierna, pero he de reconocer que, con los graves errores que está cometiendo el gobierno de Sanchez, se les está dando gasolina a la derecha y ultraderecha para que esta se desarrolle y nos meta fuego por los cuatro costados.

La Reforma Laboral hay que cambiarla desde la primera letra, es la causante de muchos de nuestros males, Podemos ya lo planteó en su acuerdo de investidura, ¿a que viene este lío entre los dos vicepresidentes?, ¿es que no sabían que se iba a liar con el acuerdo con Bildu?, ¡¡joder!! es que son tontos, tanto secreto con una cosas y un altavoz para otras, aquí todos están jugando sus cartas, algunos son cartas electorales; personalmente creo que hay uno que está perdiendo y no es la derecha y ultraderecha, que está jugando con todo lo que puede y más, de momento mañana hay manifestaciones con coches, motos y bicicletas, seguro que veremos algún descapotable y material de locomoción de alto estanding. Por este camino no vamos bien, esto tiene un feo color.