Tengo un bló

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Tmeo, la mejor revista de humor

miércoles, 5 de septiembre de 2018

Dragones domésticos

Domingo al final del atardecer. Mi pareja está en la cocina adelantando la comida de mañana, alcanza el salero de cerámica y lo trae hacia sí, y, de repente, lanza un alarido de sorpresa que me sorprende hasta a mí. ¿Qué pasa?, pregunto alarmada temiéndome lo peor, que la CIA nos haya puesto un micro, que los rusos nos hayan colado un dron-insecto o que los de Ciudadanos vengan a domicilio a intentar lavarnos el cerebro, pero, no, no es nada de eso.

Una salamanquesa se ha colado desde fuera y se ha quedado al calor de la pared orientada al sol del oeste. Vivimos a dos pasos del campo, y esto es de manera literal. Es habitual encontrarnos salamanquesas de noche trepando por la terraza para jalarse los insectos que pululan alegres e incautos.

Trepando hacia el techo

La muy escurridiza se cuela detrás del microondas. Una vez pasado el susto razonamos que esta mascota incluso es buena ya que se come los bichos que entran a casa por las ventanas...Bueno, como ella misma.

Ejemplar de la terraza.

Por la noche la descubro en el fregadero al ir a dejar los platos de la cena, así que le echo encima el paño de la cocina, la agarro con mucho cuidado y la intento depositar en el alféizar de la terraza, y la tía, en cuanto abro la mano de la ligerísima presión que ejerzo sobre el trapo, pega un salto y se escapa, como tiene que ser.

2 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Si señora, perfecto, has hecho lo que se debe de hacer, pese a que son animales, un tanto feos, sin embargo la labor que hacen es fantástica; mi hija que vive muy cerca del campo cada dos por tres me envía whatsapp con fotos con animalejos como el tuyo, escuchando en la distancia un chillido como el de tu pareja, vivimos a unos 10 Km de distancia, aún así la escucho.

De lo que realmente hay que asustarse es de lo que no se ve y también de lo que algunos dicen.

Saludos

Esti dijo...

Pues a mí me ha parecido monísima la salamanquesa. Creo que sólo he chillado cuando un murciélago se coló en casa. El resto de bichos que me visitan: hormigas, moscas, mosquitos, moscardones y montones de polillas, tampoco son tan espectaculares como una salamanquesa.