Mientras tanto me entretengo haciendo de descubridora de nuevas formas de vida limpiando el frigorífico. Cada vez que entro en la cocina asalta mi memoria un cancionero concreto. Mientras me afano por adecentar la encimera y la campana salta a mi memoria "la chica de Ipanema" por eso de Olha que coisa mais linda, mais cheia de graça, y es que,como a garota do Ipanema,la cocina suele estar llena de grasa.
Pero estoy con el frigo y esas miguitas que se quedan por baldas y cajones. Claro que esto de desmotar la distribución del frigo tiene su tema musical propio. Cuando hay que montarlo otra vez y colocar los alimentos para su conservación tarareo esa musiquita que viene acompañando a ese videojuego soviético que tantos adeptos tuvo en su día: "el tetris"
Eso por no hablar de que,dentro de los alimentos a conservar a corto o largo plazo, es decir, para decidir si van a la nevera o al congelador, suena el primer hit de Julito Iglesias:"la vida sigue igual". Y es que "las sobras quedan, las gentes se van" sobre todo después de la cena del viernes. Lo que no sobra es cava.
Y después de esta reflexión doméstica y musical, me despido hasta otra, que espero que sea en breve. Saludos.
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5 comentarios:
A ver si pronto retomas tu ritmo otra vez.
Un saludo :)
Y a ver si no es por causas adversas!
Yo desde que en un piso de alquiler cuando entré, empecé a limpiar la nevera y me salieron GUSANOS del desagüe, me alegré mil que se estropeara y el casero me pagara otra...
Yo para barrer me pongo Aretha Franklin, aunque las letras no vayan con la acción, como en tu nevera
Desde luego te has sacado una entrada con dos o varios :-))
Saludos
Tu si que estas llena de gracia y salero.
jaja "las sobras quedan las gentes se van"
pero y lo ricas que están esas sobras al día siguiente que te lo encuentras hecho, además una botellíta de cava siempre (siempre) hay que tenerla de reserva :-)
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