O de tualé

A punto de pasar el ecuador de las fiestas navideñas, con la celebración del cambio de año, una vez entrado en el nuevo, sólo queda la celebración de reyes. Es en esta época cuando la tele nos bombardea con incomprensibles anuncios de colonias, perfumes y ungüentos aromatizados.

Comprobadlo: Salen modelos con cara de "sobraos" de la vida a bordo de un cochazo de alta gama y una música new age: Colonia; los consabidos modelos, él o ella, vestidos con trajes de modistos que cuestan porciones anatómicas, juegos de luces y frases sofisticadas en inglés, con algún matiz en francés con acento de California: Colonia; versiones modernas de canciones antiguas con una joven modelo recorriendo con cara de desnutrida hambrienta una ciudad desierta: Colonia; una cotizada actriz hollywoodiense manejando una lancha deportiva por los canales de Venecia: Colonia; actores de dudoso estilo haciendo el imbécil: ¿Colonia? no, cafelito en cápsulas de Nestlé empresa que arruina a pequeños campesinos comprando tierras para cafetales extensivos que meter en cápsulas, o en su defecto, campos de cacao. What else? Eau de toilette fraiche.

Eau de tintorre, de Cacarel

No trates de entender los anuncios: Es imposible. Aún dudas, cuando los ves por primera vez, si lo que te están vendiendo es la colonia, el coche o el cuerpo del/la modelo, según precio de mercado del burdel.

Yo iría más lejos, ya que nos venden la idea salvadora de saber qué regalo hacer en reyes, ¿Sabéis que supuestamente los reyes magos están enterrados en Colonia? Yo jugaría con una innovadora idea publicitaria de tumbas, muertos y esencias aromáticas. Total, cosas más raras nos sacan en los anuncios.