Televisión "educativa"

 Me niego a ver cosas como GH Vip donde se ensalzan los valores de la garrulería, del chonismo, de la abulia y del llegar a ser algo gracias a la prensa de la bragueta y Telecirco, la cadena amiga de la vergüenza ajena, pero, no vivo en mi mundo aislado y se filtran, vía "féisbuc" o conversaciones de transporte público y/o de tanda de carnicería, cosas que rebuznan los especímenes que vaguean por ese infame programa.

La última de LA Belén Esteban (En su caso articular su nombre  no es que esté mal, es que es obligatorio) es afirmar tajantemente:

 "No voy a dejar que Kiko coja una fregona y limpie, porque aquí hay tías que lo pueden hacer"

No esperaba menos del propio hijo gandul de la Pantoja que no diera un palo al agua, pero lo de la choni a la que el cirujano plástico le toma el pelo, a la par que la pasta por esos atentados estéticos, es como para expulsarla del programa. ¿Cómo se puede ser tan cazurra? Fregar es una cosa que todo el mundo, por higiene, debería saber hacer. Algunos deberían probarlo y comprobarán que el pene no estorba a la hora de ejercitar fuerza sobre el palo del mocho para quitar la mierda del suelo.

Dos ejemplares de pobre basura blanca

Pero claro, estos son los valores que se ensalzan, cazurrismo y machismo a raudales por una televisión hecha para que la consuman mentes subdesarrolladas, o, en su defecto, que se vayan embruteciendo con el contenido.

Anoche echaban una serie en A3 llamada " Algo que celebrar". No me parece gran cosa, pero siempre me ha encantado Elena Irureta, aunque la encuentre rara en castellano. Pues bien, la tele, que educa, nos aporta el valor seguro de que ser un hombre amable, y tranquilo es ser un moñas, un blando y algo que no gusta, que es lo que le pasa al personaje de Carlos Chimarro, que se siente desesperado porque cree que no está a la altura que espera su pareja en la serie, Cristina Peña, y, para defender la tésis, se añade más leña a la idea educativa de que más vale ser un gañán pendenciero que un hombre apacible y nada amenazador, gracias a las risotadas y los comentarios de bar de los personajes de Ricardo Castella (Sobre todo) y Alejo Sauras.

Eso por no hablar del personaje de Norma Ruíz, que tiene que ser una mujer desesperada por pillar un hombre, sea como sea y es que nos venden la idea (Muy explotada por la comedia norteamericana) de que si no tienes un hombre al lado, y cuanto más gañán, mejor, no eres una mujer realizada. Para llorar.

Norma Ruíz. Objetivo: Buscar hombre que de sentido a su vida.

Pues muy bien, ante la lección "pon un amenazante gorila en tu vida", apagué la tele y me puse a leer una novela de Leonardo Padura. Menuda dosis educativa que estamos dejando que nos endilguen por la caja tonta que socializa. Y luego nos quejamos de lo machistas que salen los adolescentes.