Hipocresía papal

Estaba viendo las noticias este finde en la tele y salió el papa diciendo que puede excusarse el uso de profilácticos en según qué ocasiones. Aparte de ladrarle a la tele, esa fea costumbre que tengo y de la que tanto se ríe mi novia por no llorar, preferí no ahondar en el temita. Pero Farala en el post de ayer me hizo darle vueltas a la cuestión.

El jefe de la iglesia católica afirma que el condón puede usarse en según qué momentos, y pone de ejemplo a una prostituta que lo use para no infectar a sus clientes. Analicemos esto un momento y no va a ser porque vuelva la vieja idea misógina y eclesial de que las mujeres son un pozo de inmundicia, que esa es otra.

La iglesia católica, hipócrita como pocas, habla alegremente de la mujer que vive de follarse a extraños. En vez de decir que la prostitución fomentada por el hombre es una vergüenza que denigra a las mujeres y que muchas no han tenido más que ese jodido destino para poder comer porque es un mundo de hombres y pocas oportunidades han tenido siempre las mujeres para labrarse un porvenir, se dedica a exculpar el uso del condón para alivio de los clientes, muchos de ellos católicos.

Vamos a derle una vuelta evocadora. Varón ultracatólico casado que va con su señora  a misa y después a una manifa del foro de la familia. Aparca a su esposa en casa para que le haga la cena y él se va de putas después de haber comulgado y de protestar por el aborto, porque todas, menos su madre, son unas busconas. Se apalanca una emigrante para tirársela, que ni siquiera la considera una humana porque es negra y ya se sabe que son como animales. Le importa una puta mierda su nombre y todas las barbaridades que ha tenido que soportar para venirse a Europa a poder encontrar una vida digna. Pero no, tuvo que caminar y vivir situaciones penosas y unas cuantas agresiones sexuales, y al llegar sólo encontró la "ayuda" de un compatriota que la chulea y le pega si no consigue pasta suficiente de sus clientes. Pero volvamos al momento en que el ultracatólico palote se muere de ganas por hacer cosas que con su mujer no se atrevería. A él, que es todo un hombre, le gusta follar a pelo, pero cualquiera se atreve con estas guarras que a saber qué venéreas sufren, que hasta el nombre es femenino y viene de Venus. Y tiene que consolarse con forrársela de látex y dejarle unos billetes mohosos en la mesilla de al lado del catre donde ha consumado.

Triste y asqueroso ¿Verdad? Pues en este tipo de cabronazos piensa el Santo Padre para dispensar el uso del condón, para salvaguardar a los varones occidentales, en cambio las mujeres sean de donde sean y el resto de continentes donde los blancos no sean un grupo importante no le importan una puta mierda. ¿Que el condón no protege del SIDA? ¿Pero es que se cree que en África a los varones les importa una mierda si infectan , eso sin contar que les importe que a ellas les apetezca?

¿Los pederastas de dentro de la iglesia católica se forran su instrumento con látex?