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miércoles, 29 de mayo de 2019

Literatura inexistente de bachiller

Se acerca el fin de curso. Se ve en las bibliotecas y en el nerviosismo acuciante de los estudiantes. Mi sobrina, que va para científica, estudia con ahínco pero se nota que sus preferencias no son las humanísticas. Suelo echarle una mano a la hora de los deberes en literatura y siempre acabo cabreándome con el material que tiene para estudiar ¿Que por qué, os diréis? Pues porque, además de abusar del material electrónico, cosa que va en detrimento de aquellos chavales que no tienen ordenador en sus casas y tienen que recurrir a los ordenadores del colegio o de la biblioteca pública por un efímero ratito, les siguen dando historia de la literatura sin mencionar a las mujeres que escribieron.

Sor Juana Inés de la Cruz no sale en los libros de literatura escolar

Mi sobrina se descarga las unidades de su cuenta del insti y le salen unos archivos pdf preciosos y coloristas. Ahora, acabando el curso, da literatura del siglo XX. Poesía de la generación del 27, y, claro, ahí sale Pedro Salinas, Cernuda, Dámaso Alonso, Alberti, Juan Ramón Jiménez y García Lorca, cómo no. Pero así como sale Alberti o Jiménez, ni media frase sobre María Teresa León o Zenobia Camprubí.

Alberti y su señora. Ah, ¿Que su señora se llamaba María teresa León y que escribía? Pero no sería más que la lista de la compra.

Aún te contarán que Alberti fue el último miembro en morir de la generación del 27 porque resulta que Josefina de la Torre, aunque muriera después que el gaditano, estaba silenciada a pesar de que Jorge Guillen la incluyera en su antología de la poesía española contemporánea, a ella y a Ernestina de Champourcin. Y es que las mujeres de aquella época tuvieron la mala suerte de ser silenciadas y anuladas por una guerra y una posguerra. Nadie las reivindica en los colegios y mucho menos en los libros de texto escolares que se supone que refieren la historia de la literatura local.

Juan Ramón Jiménez y señora. Ah ¿Que también escribía Zenobia Camprubí? Pero sería tomando notas de secretaria de su marido, ¿No?

Los libros de literatura de los bachilleres de la segunda década del siglo XXI aún ignoran a las escritoras. Lo hacen con las poetisas de la generación del 27 y con escritoras de otra época. Me tragué los apuntes de poesía mística de los siglos XVI y XVII de los escritores hispanos y hablaban, cómo no, de Fray Luis de León o San Juan de la Cruz, pero a Santa Teresa de Jesús o a sor Juana Inés de la Cruz, que cultivó otros estilos narrativos además de la poesía, ni una mísera palabra.

Josefina de la Torre murió después de Alberti, pero ella no era de la generación del 27 porque nadie nunca la oyó nombrar, y los escolares de hoy día, tampoco.

Y así se sigue ninguneando el nombre de las mujeres que escribieron, tanto en las generaciones pasadas como en las actuales. hay que reproducir el cliché de que, para creadores, ellos ¿Ellas, quienes son ellas?

Qué vergüenza de ediciones para escolares. Qué vergüenza de docencia que a las mujeres silencia con indecencia.

2 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

No solo en literatura, en música, en ciencia, en....

Saludos

Anónimo dijo...

Siempre me he preguntado quien decide sobre los contenidos educativos, porque es obvio que es ahí donde se asienta la educación o el despropósito. Nunca he logrado conocer sus nombres...