Circo americano

Y después de habernos tragado la elecciones autonómicas de dos comunidades históricas y con carácter propio como son Galiza y Euskal Herria, donde han ganado los mismos: La derecha rancia y empresarial, aunque cada uno sea nacionalista a su manera, nos espera el acto electoral de la otra gran autonomía histórica, que es Catalunya, donde también va a ganar la derecha habitual, al igual que en las otras dos.

Y no contentos con eso, importamos, como los canales por cable, payasadas norteamericanas tipo "embargos a lo bestia", "la casa de empeños" o "qué guays son las cárceles yankees" que te echan por la noche para espanto y fomento del desvele, y nos cuentan cómo va el circo electoral entre burros (demócratas, Obama) y elefantes (republicanos, Romney). Los dos, de la derecha, como no puede ser de otra forma.

Y nos cuentan, como si fuera cierto, que para el tercer debate, una payasada como otra cualquiera donde nos quieren hacer creer que hay "algo" auténtico, se dilucida quién gana o pierde. Si encima hay un empate técnico entre los estados de la unión. Que si los Estados más avanzados del Este y de la costa Oeste son pro-Obama y los centrales con la Texas drogada de Armstrong el heptacampeón yonki-yankee del tour gabacho, son pro-Romney.

Y estos dos nos van a dar muchos disgustos

Y la Florida gusanera donde el otro Bush gobierna está indecisa. ¿Por qué? Porque al final, como siempre, serán los empresarios que dominan en mundo y que son cantera del grupo terrorista Bilderberg, VII asamblea, los que deciden si les conviene poner en la casa blanca al mulato (Cómo me acuerdo de esa novela cubana de Alberto Insúa llamada "el negro que tenía el alma blanca") o al whasp insufrible.

Y nos hacen perder el tiempo con estas bobadas del circo americano que en el fondo nos dan igual porque gane quien gane, es decir, quien coloque el poder fáctico en el despacho oval, nos va a sodomizar sin vaselina igualmente jaleado por los palmeros cuyas cotizaciones suben como la espuma en Wall Street a la par que se pone de saldo nuestra economía.