Funciona como un self service y tú agarras un plato y te vas sirviendo cuantas veces quieras de los primeros fríos y calientes (Ensaladas con muchos ingredientes a escoger, tallarines al pesto, hojaldres de boniato), segundos como brandada de bacalao, arroz caldoso con gambas, conejo al ajillo, albóndigas, dorada en tempura... Y postres. ¡Postres a repetir! Mirad e surtido:
Flan de huevo, crema catalana, mousse de mango, limón y fresa, bocadito de nuez, hojaldre de frambuesa, pasta de naranja, y trufas de chocolate y castañas. Mmmmm. Menudo atracón de azúcar que me pegué. Y lo mucho que me relamí.
Por si alguno tiene interés y se acerca por estos lares, en días escolares, aquí os dejo el menú degustación.
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16 comentarios:
Ummm, ñam, ñam. En esas escuelas se come muy bien. El año pasado una amiga nuestra estaba haciendo el modulo de cocina y nos avisaba. A uno de los chicos le cayó el café, apenas unas gotitas en el plato y el profe se enfadó muchísimo. Son hiperperfeccionistas. Yo también estuve a punto de matricularme pero por horario renuncié. La cocina engancha. Y esos postres que has puesto también. ¡Golosa!
ayyych! yo también he ido un par de veces a eso, y es genial! Probé el conejo con chocolate y creí morir! Qué bueno, nunca lo habría dicho!
Uhauuu! y encima, con todos los ingredientes de temporada. Estos chic@s son unos grandes gourmets!
Me encanta la cocina. Estos dias, me toca ya empezar con los panellets y los pies de cerdo con nabos y castañas, aunque sea tradicional, está riquíiisimo, os dejaré unas recetas en el blog!
En Ripoll, también tenemos una escuela de cocina, es un arte!
Agur, Basque.
Juli, de los post con alto contenido en azucar, hay que avisar, por tutatis, que se me sublevan las papilas gustativas, la pituitaria y el aparato digestivo entero... :D
Calla, calla que me mudo, mejor demudo, con solo imaginarlo. Envidia insana es lo que me dais. Un fuerte abrazo.
A buenas horas leo esto, con el estomaguillo haciéndome brrurrrummm. Un compañero mío celebró su jubilación en la escuela de hostelería ¡qué menú! Ahora me comería un mousse de mango sin primero ni segundo mmmmmmmmm.
Pues yo no soy muy de comer pero me parece un planazo!!
Joer qué hambre me está entrando.
Es verdad que en estas escuelas de cocina se esmeran y hacen cosas muy buenas
maldita sea... menos mal que me pilla lejos, ¡qué hambre!
Eres una malvada Juli Gan, que lo sepas!!!
jajajajajaja
besos
Me quedo con los reposteros...
Neska, que rico rico!
Vuelvo a ser una copia del perro de Paulov, salibándome toa por las fotos y sin campanilla que me suene!
MARTINA: Sí, golosa por la gracia de Dios. Jaaajajaja. Desde luego los chavales se esfuerzan mucho.
HORMIGA:Eso no lo he probado, pero cuando lo pongan en el menú, ya me apareceré.
FELICITAT: Allá por donde voy anuncian panellets. Es muy curioso. Ahora es época de leche frita...
SRA. CASTAFIORE: Sí, por Belenos. He sido cruel, lo reconozco, pero es sólo un día.
EMEJOTA: Es un homenaje a mi cuerpo por las buenas notas que me ha sacado en los análisis.
CANDELA: El Maître nos preguntó donde queríamos sentarnos, y nos aguantamos las ganas de decirle que diréctamente a la mesa de los postres, pero tentaciones, todas.
ITXARO: Sí, porque tienen ilusión...y los profes encima. En esta son muy estrictos.
PENA MEXICANA: Pues sí que soy malvada, pero es sin conocimiento de causa, porque no pensé en las consecuencias que os está acarreando.
ALSON: Yo también. Los flanes, estupendos, el bizcocho, genial, la mousse, ligera, las trufas, prohibitivas...
BLAU: Eso por si alguna vez entre semana aterrizáis por Manresa, está enlazada su web.
JIRAFAS EN GERUNDIO: Pues, por si acaso, aléjate de los aparatos eléctricos y electrónicos que tengas debajo de tu largo cuello, no quiero ser responsable de averías, je,je,je.
yo tb he ido a un sitio de esos, mmmmm genial, me está entrando hambre eh, y eso q no soy especialmente golosa
me gusta la cocina, pero de comer no de hacer jajaja
besos
Vaya hambre que me estás dando, y qué pinta tienen esos postres.
Leche frita? Ummmm, mi vecina hacía leche frita, y le traía a mi madre, unos cuantos cuadraditos de leche, para que nos relamiéramos los dedos!
Nunca me he atrevido a hacer, nunca es tarde para ello.
Un beso.
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