Domingo en el cor de Catalunya. Cae un sol despiadado, tanto que los pajaricos se fríen en las ramas. A eso de las seis de la tarde cuando el calor aprieta, pero no ahoga, aunque poco le falta, salimos a pasear por esta ciudad industrial de ses meses de invierno y seis meses de infierno. Esta semana comienza la festa major y había alguna actividad como el paseo de la pubilla y el hereu (los jóvenes elegidos como representantes de la ciudad en fiesta). El paseo va precedido de trabucaires quemando pólvora y una batukada.
En la plaça major, presentan a los niños a la Tremenda, una de las alegorías de cartón-piedra de la fiesta. Nos tomamos una cervecica en un bar en el que hace más calor dentro que fuera. Decidimos ir hacia la Seu (Iglesia imponente sobre una atalaya de roca que domina el curso del Cardener, el río sobre el que se fundó la ciudad). Decidimos dar una vuelta sobre el nuevo paseo abierto entre las rocas que va a dar a la vía de Sant Ignasi. Es un peseo elevado sobre el río, pero bajo la roca donde se alza la Seu. Sale de la plaça de la Reforma, que hace honor a su nombre, porque siempre está de ese modo y que podéis contemplar en la cinta Plácido, de Luis García Berlanga. El paseo tiene una curiosa dedicatoria:
Los AC/DC tienen un parque.
Las vistas son de lo mejor de la ciudad. El curso del río deja al otro lado la estación y sobre ella una montana coronada por la torre de Santa Catalina. Sobre el Cardener, el afamado puente viejo (Nada que ver con cierto culebrón de sobremesa de cadena privada ) tantas veces hecho y deshecho desde hace siglos.
El puente medieval, reconstruído en 1962
Mi novia, queriendo ver con calma y perspectiva el cuadro panorámico, se acerca a un pretil sorteando toda clase de excrementos caninos. Ella es una mujer fría, serena. De una pieza. Jamás la he visto histérica ni dar un gritito agudo de miedo....Hasta ese preciso momento. De repente me la encuentro soltando chillidos nerviosos y saltos de bailarín ruso. Estupefacta me quedo mientras la veo darse azotes con un periódico enrollado. Resulta que un lagarto de considerables proporciones se le ha subido por el brazo hasta casi llegar al hombro y ella, al notar las garras, y ver al saurio, es presa del pánico.
Este simpático saurio se paseó por mi moza.
Menudo trauma que lleva desde entonces. A mí se me ha caído un mito a los pies. Una mujer de una pieza dando gritos y botes como un heavie desatado. Y todo porque un reptil ha tenido el capricho de subirse a su brazo. Porque tienen mucha cara, que les das la mano y te toman el brazo los lagartos. Igual es que los invasores de V han vuelto (Para esto, lector, has tenido que vivir en los 80). Creo que se le quitó el calor de golpe. Ay el lagarto Juantxo, o Wally Gator. Ya lo hemos bautizado y todo.
Missing (Desaparecido)
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Me reencontré con esta peli a principios de agosto de 2024, en La 2 de
Televisión Española, cuando todavía no estaba apaciguado (¿lo está ya?) el
asunt...
Hace 2 días
5 comentarios:
digamos que has descubierto algo nuevo de ella....( yo hubiera hecho igual , menudo asquito que me dan esos bichos);-)))
tengo varios en Paradela.
Son estupendos antiinsectos.
Espectacular la Seu, hace muchosss años fui de propio por ver la imagen de la Mare de Déu, no es que sea yo una devota pero quería ver esa en concreto. Tengo guardada una lámina por motivos sentimentales, nos explicaron que no es la original que se quemo en un incendio.
Llegará septiembre y bajaran este calor y humedad, esperemos!!!
Ah, ya te he situado ! Madre mía enmedio de catalunya , ke calorrrrr , aunque en Barcelona es oara morirse esta semana !
dileporfavorquemeperdone pero...
juaaaaaaaaajajajajajajaja
pobrecilla, pero de imaginarme el cuadro no me sale nada más que jajajajajaja
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