Pero bueno, no pensemos en eso. Aguantemos un par de días más y al salir por la puerta, con mi libertad condicional laboral, dedicaré un corte de mangas a la oficina que va a luxarme el codo. Cantaré el estribillo que hiciera famoso Nino Bravo, aunque sea la luctuosa narración de un fugitivo del muro de Berlín. Lo que importa es el mensaje reiterativo cuando el tema pega fuerte:
Y si no, los de Weezer tienen toda la razón:
Tengáis días exclusivos para vosotros solos u os tengáis que alquilar por horas para pagar la vida, disfrutad de estos días radiantes. Yo sí que lo haré. Hasta la vuelta.
7 comentarios:
Si es que cuando se conoce la libertad ya no se olvida. Disfrute usté
¡Felices casi vacaciones, Juli! Espero que disfrutes muchísimo del verano y, por favor, mantente alejada de las Kalashnikov por lo que pueda pasar, jajaja. Entiendo que tiene que ser muy intenso trabajar de cara al público. ¡Buffff! No siempre se tiene el humor ni las fuerzas para responder con simpatía o amabilidad. En fin, que el descanso te sirva para recargarte y no pensar tanto en el asesinato en masa. ¡Miles de besos!
En la mayoría de las oficinas, lo de estar cara al público no lo quiere nadie... por algo será. Que disfrutes de tu libertad condicional a tope.
Sea feliz.
¡Pásalo bien donde quiera que vayas!
Ondo izan Juli, eta laster arte. Besarkada bero bat Donostitik zauden lekuraino, luze luzea!!!!!!
Antxon: Besarkada luzea izango da, baina hiri berdinean gaude oraingoz. Muxu Donosti bertatik :)
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