Tengo un bló

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Tmeo, la mejor revista de humor

miércoles, 10 de agosto de 2022

Si saben cómo me pongo, "pa" qué me invitan.

 Es agosto y bastante tenemos con los cabreos que nos producen las penúltimas excusas para encarecerlo todo. ¿Os acordáis cuando el kilowatio hora subía a precios exorbitados antes de la única guerra que, por lo visto, ha existido jamás? Antes de que el otoño nos hunda en una crisis lacerante producida por un puto capricho de los "mandamases" que quieren castigar a Rusia porque hace las mismas cosas que EEUU, pero que vamos a pagar, no Rusia, sino nosotros, queda el verano bostezante y sus noticias de mierda.

La última, que me permite un divertimento, es el vídeo donde "el preparao" no se levanta al paso de la urna con la espada de Bolívar, que, todo sea dicho, les ha quedado un pelín hortera. La cosa es que al "preparao" lo invitaron a la toma de posesión del nuevo presidente de Colombia y el baranda, aceptó ir como jefe del "astado" que es. Po fueno, po fale, pos m'alegro. Quizá si el nuevo presi colombiano hubiera sido de derechas la cosa hubiera cambiado, ¿Quién sabe?

La noticia estúpida del momento


Total que pasean la espada de Bolívar, todo un símbolo libertador de Colombia en la lucha contra la corona de España hace doscientos años y el hoy rey de la misma, ni aplaude, ni se levanta, lo cual queda fatal y feo y es de una falta de respeto al país anfitrión que da vergüenza ajena. Que sí, que vale, que el rey, dicen, no puede rendir honores a la espada que humilló a España...hace doscientos años. ¡Hace doscientos años, por amor de Dios! Que Colombia ha hecho cosas peores a España como invadirnos con el reguetón.

No me sirve la excusa de la humillación cuando es una cosa del siglo XIX estando en el siglo XXI, porque si es por eso, bien que estrecha la mano a cada presidente yanki que pisa España y eso que la paliza de 1898 es muy posterior a las de Bolivar, San Martín u O 'Higgins y nos hizo bastante más daño. Me huele más a complejo de superioridad  herido que a otra cosa. 


En fin, que el "preparao" más que dejar intacto su honor y su "orgusho" por algo que pasó hace 200 años, ha quedado como el culo porque en este mundo "modenno" en el que se crean lazos políticos para rentar lo económico, hubiera quedado mejor declinando la invitación, como ha hecho tantas otras veces. Si es que ya lo dijo aquél: "Si saben cómo me pongo, "pa" qué m'invitan.

3 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Cuando mi hermano me decía: deja de estar "informado" que te van a volver loco, yo me cabreaba y lo tildaba de facha y capullo, siempre de forma amigable que somos hermanos, al final le voy a tener que dar la razón, llevo un tiempo que veo muy poco las noticias periodísticas y menos los informativos. He llegado a la conclusión desde hace tiempo, pero ahora más todavía, de que somos un país cainita y cuando uno dice una cosa el otro dice la contraria, es lo mismo que sean hermanos, familias, políticos, instituciones, medios de comunicación, si uno dice si, hay otro que dice no, somos incapaces de decir, bueno, con estas mimbres ¿hasta donde vamos a llegar?, ¿no aprendimos en su día?, parece que no, cuanto razón lleva el que dijo que la historia se repite.

Espérate que se acabe el verano que entonces será el llorar y el crujir de dientes.

Saludos

Francisco Cordero dijo...

Es un gesto de un sátrapa colonialista que cree que los países de Sudamérica le pertenecen todavía. Os acordáis cuando el lamentable Zapatero no se levantó ante el paso de algún regimiento yanqui con su banderita? La que se lió! Y eso que era un lamebotas del imperio asesino yanqui (como todos).

Anónimo dijo...

Bueno, paliza, lo que se dice paliza...eso en Hollywood y en los pasquines de Hearst. Malamente, se da una paliza a un ejercito mejor armado, por parte de un grupo de mercenarios, sin darse una batalla donde en verdad, se midieran fuerzas. La respuesta española al bloqueo marítimo gringo, parece sacada de la pelicula de los hermanos Marx, Sopa de Ganso. Por no hablar del sabotaje, al submarino torpedero de Peral, por si solo determinante.
En las Filipinas, tuvieron que armar a los nativos, supuestos aliados, reconvertidos en enemigos, con los fusiles alemanes Mauser los mejores del mundo, con los se armaba el ejercito español.
Al igual que los supuestos barcos de madera de la marina de guerra, eran modernos destructores, comprados a Francia.
En realidad como reconoció el propio Prim, lo que quedaba del imperio era un foco de conflictos, con más pérdidas que beneficios.
Cuba sin apenas riquezas naturales, ahora sin el comercio del Pacifico, perdió su inmensa importancia logística, al ser punto de salida hacia Europa, de las mercancías de América y Asia.
Era menester montar un paripé, para vender las colonias, como Las Carolinas a Alemania y otras a otros, sin convulsionar a lo más reaccionario de la sociedad, que aún soñaban con valses imperiales. Saludos.