Tengo un bló

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Tmeo, la mejor revista de humor

sábado, 10 de marzo de 2018

Ladran, luego son perros.

¿Qué tienen en común el sector más rancio de la curia católica, el partido neofascista Vox o los lameculeros del régimen como Marhuenda? Pues que todos rabian porque las mujeres de todo tipo y condición reivindiquen una igualdad económica, social y moral. Los hay hasta de izquierdas purísimas.  En el fondo, no deja de ser un todo supremacista con sus posiciones opuestas bien definidas unidos sólo en este punto que amenaza su privilegio. Sí, claro que hay(pocas) mujeres en cotas de poder dentro de nuestra sociedad ultraliberal y capitalista, y esa es una de las críticas internsas del feminismo de hoy día. ¿Quizá se haya aprovechado el liberalismo de la lucha feminista? Pudiera ser, pero no porque haya alguna contradicción fruto de los pasos que se dan para lograr un bien común, y a pesar de ello, lejos del liberalismo, voy a dejar de luchar sólo porque se repitan los clichés que en varones, por lo visto, a algunos sesudos izquierdistas no parezcan molestarles tanto.

Mujeres trabajadoras

En el Salto diario, hay un buen artículo que explica el rabiar de Vox y Marhuenda ante la celebración del 8 de marzo. Lanzan ridículas diatribas sobre este día reivindicativo, cosa que no les deja en un gran lugar.

Es curioso que, con el fin de minimizar la imprtancia del hecho, total son mujeres, se dediquen con  un paternalismo pestilente, a abrirnos los ojos porque, para unos es el demonio quien nos guía, para otros es el comunismo más feroz y la izquierda más peleona la que ataca y, para unos terceros, es el fascismo quien nos adoctrina, pero como somos todas criaturas sin cerebro, no lo vemos.

Ejemplo vomitivo cualquiera

Puede que hasta les parezca mal que hoy recordemos como 129  mujeres perecieron en el incendio de su fábrica neoyorkina en 1911. También murieron 17 hombres, la mayoría eran niños (Y niñas) inmigrantes que encontraban en fábricas miserables como esta su único sustento. Murieron por la mezquindad de los amos al dejarlos encerrados sin posibilidad de huida después de declararse el incendio, porque, según ellos, hurtaban algunas de las blusas que fabricaban. La explotación capitalista de las más pobres, casi siempre, mujeres. 

Digan lo que digan algunos iluminados que nos miran por encima del hombro, porque en el fondo de su ruin alma no pueden reconocer la diversidad femenina, como cantan en el vídeo de Ereintza Dantza Taldea: "Todas somos cómplices y os quiero a todas".

8 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Creo que aparte de ser perros, el dicho en su forma real, también es perfecto," si ladran es señal que que cabalgáis". Desde mi humilde opinión las mujeres tenéis un problema y es el hecho de que hay auténticas machistas que son peores que los hombres y lo que es peor están como ministras de igualdad y trabajo y encima deseando hacer huelga a la japonesa.

Me temo que con los aires que recorren por Europa, solo las mujeres podéis realizar un cambio.

Anónimo dijo...


Pero, Juli, ¿por qué supones que una crítica, sea la que sea, significa considerar que no tienen cerebro las mujeres? Esa actitud es típicamente española (sin sexo), y "española" en el peor sentido: por victimista, por sectaria, por lo que transpira de posesión de una verdad trascendente que no puede ser mancillada con la más mínima crítica, es decir, una "verdad" religiosa.

Yo he criticad en tu blog los planteamientos feministas expresados por la propaganda del Poder en la reciente "huelga", en la medida en que se pretenden superadores de la lucha de clases a través de la lucha de sexos, lo que implica que no sólo tú estás en el mismo bando que Ana Botín o Esperanza Aguirre, sino que, por las mismas, a mí se me mete en el agradable club de Aznar, Felipe González o Rodríguez Galindo. El corolario de todo esto es que tú y yo, explotados, no estamos en el misma clase, sino en auténticos sindicatos verticales a los que el Poder pretende enfrentar. Por abajo, por supuesto, porque Ana Botín y Aznar se entiende estupendamente.

Esa es mi posición: ahí está para que la critiques, si no estás de acuerdo. Pero no digas que criticar una idea o un planteamiento es negar el cerebro a las mujeres. Como mucho se podrá negar el cerebro a una mujer o a un hombre concretos, descerebrados, pero ¿a todas las mujeres? ¿A todos los hombres? Porque si fuera así, ¿qué nos diferenciaría de negárselo a los pobres, a los judíos, a los negros en conjunto?

Que no, que no, Juli. Que esto no va de hombres y mujeres medidos por su aparato genito-urinario, sino de mujeres y hombres explotados y de mujeres y hombres explotadores. ¡Que sólo superando la explotación se acabará -como han demostrado las experiencias históricas en ese sentido- con todas las formas de discriminación!

Salud, Juli.

Juli Gan dijo...

Sade, creo que interpretas muy mal mis palabras. Es más, ni intuyes la ironía que desprenden. Yerras por este motivo. Interpretas victimismo y no es más que una burla, precisamente, es imperceptible para el sentido del humor español, ya que lo mencionas. Pasaré por alto el resto de tu comentario porque no tiene fundamento y porque me fastidia escribir desde el teléfono. Buen fin de semana, Sade.

Juli Gan dijo...

Emilio Manuel: El machismo está enquistado en la sociedad, claro, y de eso no se libra ni la conducta de las mujeres, pero el machismo institucional es, en teoría, más fácil de deshacer. De Europa no creo que venga nada diferenre. Las dirigentes poderosas mujeres europeas no se diferencian en nada de los varones. Buen finde.

Anónimo dijo...

"Pasaré por alto el resto de tu comentario porque no tiene fundamento". Esto, Juli, se llama eludir la cuestión desde una posición dogmática. Los argumentos se rebaten con argumentos, no anatematizándolos ni quemándolos en la hoguera de ninguna complaciente y autoconcedida superioridad a priori. En fin, salud y a pasar buen fin de semana.

Sade

Juli Gan dijo...

Perdona que me ría,Sade, pero, además de no ser un blog academicista en el que ni tú ni yo aportamos bibliografía comparada ni nada parecido, tu "argumento" de estar en el bando de Botín daughger y Aguirre o la cólera de Dior merece rebatimiento alguno por lo ridículo que es, y, sobre todo, porque no me gusta escribir mediante el teléfono. Si no te vale, es lo que hay. Salud.

Anónimo dijo...

Tienes razón, Juli. A seguir bien.

Juli Gan dijo...

Una azafata va por el pasillo del avión ofreciendo periódicos. Una pasajera recoge uno, lo mira y llama a la azafata y enseñando el diario dice: "Disculpe, pero no me gusta que me den La Razón como a los tontos".

Saludos.